miércoles, 15 de octubre de 2014

Uno nunca sabe cuan atribulada está una persona. Lo físico no lo es todo:
Hoy, vi a una mujer muy hermosa subirse a la micro, era un poco extraña, no entendía el concepto de la tarjeta/pasaje, por lo que asumí que era extranjera. Después de un rato, me di cuenta que estaba muy cerca mío, así que la observé; delgada, pelo largo, mucho maquillaje, tacos y ropa que estaba muy forzadamente combinada, a simple vista, toda una snob. Observándola mucho rato más, me fijé en sus brazos, delgados y pálidos, con algunos rasguños, "un gato", "un perro", "sexo violento" pensé, pero me di cuenta que no eran tan solo rasguños, eran cicatrices monstruosas de autodestrucción. ¿Que cómo lo sé? Fieles amigas que -afortunadamente ya no- tengo. Tema aparte: lo mejor de hacer estas cosas a escondidas, es temer a que te las vean e inconscientemente hacerlas en pliegues muy discretos. Prosigo.
Vi sus cicatrices enquistadas y no eran pocas. En ese momento me golpeó como una cachetada, no sabía nada de ella y no soy nada para juzgarla.
Ahora, me pregunto, ¿qué problemas habrá tenido/tiene? Si es preciosa, se viste bien y es casi el sinónimo de perfección. Mentalmente, ¿qué tan distintas seremos?
Lo superficial es nada comparado con el poder de la mente.

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